Qué es el dropshipping
En los últimos meses, muchos emprendedores han apostado por el dropshipping como método de trabajo en su comercio electrónico. Esto no es ni más ni menos que el reparto de tareas entre las tiendas online y el mayorista que le sirve los productos. Mientras que el primero se encarga del marketing, de ofrecer los productos, la atención al cliente y la facturación, el mayorista lo hace de la gestión del stock, del almacén y del envío de pedidos.
¿Por qué este auge del drop shipment?
Muchos están apostando por esta modalidad de venta por las ventajas que ofrece, sobre todo para aquellos que están empezando.
Menos inversión inicial
Quiénes quieren crear una tienda online tradicional, saben que en un primer momento requiere una inversión inicial fuerte. A los costes de diseñar y desarrollar el propio ecommerce, hay que sumar el de la compra de stock, el alquiler de un lugar que sirva de almacén.
Practicando el dropship estos últimos costes nombrados desaparecen. Y es que el gestor de la tienda no tiene que comprar los productos que va a poner a la venta, y mucho menos almacenarlos. Solo tendrá que llegar a un acuerdo con el mayorista para venderlos a un precio marcado, y encargarse de las gestiones que le toquen en el reparto.
Sencillez
Además de los costes, aquellos que nunca han montado un ecommerce no son conscientes de todos los trabajos que este requiere. Llegando a un acuerdo de drop shipping la puesta en marcha de la tienda online es mucho más sencilla, ya que:
-No hay que hacerse con un local que haga las veces de almacén.
-No hace falta buscar una empresa de logística y negociar con ellos las condiciones de los envíos.
-Al no tener los productos físicamente, el gestor del ecommerce no tendrá que encargarse de hacer los paquetes.
-No tendrá que realizar inventarios periódicos sobre el stock, ni para saber qué productos tiene disponibles ni para llevar el control financiero.
-Evitará lidiar con devoluciones y con pedidos al almacén que no lleguen a tiempo.
Pocos gastos fijos
Además de ahorrarse dinero en la inversión inicial, los que apuestan por un modelo de venta online basado en el drop shipment evitan también tener que hacer frente a gastos mensuales considerables. Es más, algunos lo hacen desde un ordenador personal y en su casa en su tiempo libre.
Así las cosas, el coste mensual mínimo se ve realmente reducido, puesto que solo hay que incluir los gastos de una conexión a Internet, el equipo (que seguramente ya se tenga) y los gastos de mantenimiento del ecommerce (dominio y hosting).
Flexibilidad en la localización
Tal y como se explica en el apartado anterior, muchos gestores de tiendas online basadas en dropshipping trabajan desde su casa. Pero también podrían hacerlo mientras están de vacaciones o tomándose algo en una cafetería. Y es que solo es precisa la conexión a Internet. Por tanto, el dropshipping es una solución muy aconsejable para aquellos que tienen problemas de movilidad o quieran obtener unos ingresos extras.
Ofrecer una amplia selección de productos
Como no hay que invertir en el stock inicial, el dropshipping permite crear tiendas online con miles de productos. Y es que solo es preciso negociar con un mayorista que cuente con un catálogo suficientemente amplio, o bien contar con varios provedores.
Negocios fácilmente escalables
No hay problema porque el negocio crezca, o al menos, no más allá de tener que invertir más tiempo en el mismo. Y es que cuando más se vende, más trabajo hay que realizar. Pero como los gestores de comercios que practican el dropshipping no tienen que enviar los productos, el trabajo crece a un ritmo menor.
Es por esto que el dropshipment es un modelo de negocio que cada vez está expandiéndose más, tanto en personas que están empezando con la venta online como aquellos que ya tienen experiencia en vender por internet.
Drop shipment y sus contras
Eso sí, antes de lanzarse a un negocio de dropshipping también hay que tener en cuenta que no solo existen ventajas. Es preciso saber también que existen cosas que no gustan tanto a los gestores para poder analizar la situación y decidirse de manera segura.
Bajo margen de beneficio
Este es el principal obstáculo que encuentran aquellos que quieren ganar dinero a través de un ecommerce. Y es que muchos apuestan por competir en el precio. Su teoría es que como los costes son bajos, no necesitan ganar mucho dinero para mantener el negocio. Y sus precios son irrisorios, lo que hace muy difícil entrar en el mercado.
Esto se supera gracias al buen hacer. Por lo general, aquellos a los que no les preocupa ganar mucho más dinero, y ponen los precios más que ajustados, no cuentan con una buena página web y mucho menos con una esmerada atención al cliente. Si se sabe elegir bien el nicho de mercado, se cuida la presencia y la reputación online, así como el trabajo en posicionamiento y se ofrece una buena atención a los compradores, el éxito del negocio está casi asegurado.
Sin control del stock
En los negocios tradicionales, en los que el propietario tiene los productos en su local, es relativamente fácil controlar si hay disponibilidad de uno en concreto. Pero con el dropshipping, los mayoristas venden a varios comerciantes, y el inventario cambia no solo cada día, sino cada minuto. Por tanto se corre el riesgo de que no haya disponibilidad de una producto que ha comprado un cliente.
La solución a esto es trabajar con herramientas que permitan la sincronización total entre el almacén y la tienda online. Y si eso falla, ser rápido en avisar al cliente y ofrecerle una solución.
El problema de los envíos
Este problema se da en los dropship cuando trabajan con varios proveedores, así que si se piensa vender solo lo de un mayorista, mejor saltarse este punto.
Al vender productos de varios almacenes, hay que tener en cuenta que cada uno tendrá sus propias normas de envío, trabajará con una empresa de logísitica u otra y los costes no serán los mismos.
Pongamos un ejemplo: un cliente compra 4 productos en una tienda online, cada uno de un proveedor diferente. Cada mayorista hará el envío de su producto, cobrando los costes pertinentes. Por tanto, en ese caso, el gestor de la tienda online tendrá que asumir el coste de los envíos por separado. Por usabilidad y por reputación, es mejor fijar un coste del envío a todos los pedidos, y después pagar a cada proveedor cada paquete. Incluso hay muchos ecommerce que señalan como gratuitos los costes de envío, aumentando el precio de los productos que venden de manera proporcional.
Fallos por parte del proveedor
No pocas veces los gestores de tiendas online en dropshipping tendrán que asumir como suyos errores que no hay cometido. Y es que hasta las mejores empresas mayoristas pueden tener fallos a la hora de enviar un producto confundido. Y en ese caso, el gestor de la tienda online es quién debe pedir disculpas y hacerse responsable del error.
Eso sí, si uno se decide por un proveedor de mala calidad, estos dolores de cabeza serán el día a día del propietario del negocio.
Cómo encontrar buenos proveedores para iniciar un negocio de dropshipping
Tal y como hemos ido apuntando en el artículo, encontrar a un buen proveedor es un paso importante para tener éxito en un negocio de dropshipping. Éstos se distinguen por:
-No cobran cuotas fijas a las tiendas online. Es decir, que no cobran una mensualidad por vender sus productos a través de una tienda online. Esto solo lo harán los directorios (como se explicará más adelante). Los mayoristas solo cobrarán por cada producto vendido.
-No tendrá venta directa al público. Porque entonces sería una competencia desleal, al no poder el gestor de la tienda online meter su margen de ganancia, ya que venderá siempre más caro que el mayorista.
Sabiendo esto, ya se puede empezar a contactar con mayoristas.
Fabricantes
Los fabricantes son los preferidos en los negocios de dropshipping a la hora de escoger un proveedor. Y es que son fáciles de localizar (por lo general), y muchos ya cuentan con mayoristas para la distribución de un producto.
Los fabricantes, además, ofrecen precios mucho más competitivos, ya que no existen intermediarios.
Búsquedas en Google
Esta opción es la elegida por muchos al comenzar un negocio de dropshipping: saben qué quieren vender, pero no tienen ni idea de dónde encontrarlo. Eso sí, a la hora de utilizar los buscadores se deben tener en cuenta varios aspectos.
-Utilizar las búsquedas amplias. No hay que quedarse con los primeros resultados, hay que seguir mirando más allá de la primera página. Y es que los mayoristas no acostumbran a realizar acciones de marketing o promoción, y por tanto no se encuentran entre las primeras posiciones en términos de SEO. Tal vez haya que llegar al puesto 100 para encontrar al mayorista ideal para un negocio.
-No juzgar por el sitio web del mayorista. Por el mismo motivo que el anterior, porque los mayoristas no se preocupan de la venta al público, sus sitios webs suelen dejar bastante que desear en términos de usabilidad y diseño. No es una buena opción rechazar de primeras a un proveedor porque su web no sea adecuada.
-Buscar sinónimos y otros términos relacionados con el producto. Al no hacer SEO, no estarán posicionados en las variables. Además, también es una buena práctica buscar por términos tales como distribuidor, proveedor y dropshipping.
Investigar a la competencia
Si cuesta encontrar al mayorista o fabricante de un producto en concreto, una buena idea será hacer un pedido a la competencia, siempre y cuando se tenga la seguridad de que practican el dropshipment. Al hacer la devolución, seguramente aparezca la dirección del mayorista con el que trabaja.
Asistir a ferias
Cuando se asiste a una feria especializada, se pueden encontrar fabricantes de productos con los que se quiera contar para crear un negocio de dropshipping. Allí estarán también los proveedores, lo que facilita ese primer contacto.
Directorios
Como se comentaba al inicio de esta sección, existen directorios que ponen a disposición de los propietarios de ecommerce a mayoristas, según el nicho de mercado al que se dirigen.
Los directorios de mayoristas agrupan a proveedores que practican el dropshipping por productos y nichos de mercado. Además, quienes los utilizan pueden estar seguros que esos mayoristas funcionan bien, y saben trabajar con esos métodos. Seguramente el directorio lo haya comprobado antes de añadirlos, ya que su modelo de negocio reside en las cuotas que pagan los gestores de las tiendas online, y si no están satisfechos, cambiarán de directorio.
Pero ¿merece la pena pagar por ello?
Lo primero, es saber en qué punto se encuentra el gestor de la tienda online.
Si no se conoce el mercado, un directorio puede llegar a ser útil, puesto que así se puede arrancar el negocio. Es una buena forma de tomar ideas. Muchos emprendedores se dan de alta en directorios durante uno o dos meses, y así consiguen contactos. Una vez que han hecho una base, dejan de pagar la membresía.
Pero si ya se tiene experiencia, seguramente haya métodos (como los que se explican en los puntos anteriores) para encontrar mayoristas, por lo que no es necesario pagar por encontrarlos en los directorios.
Así todo, es preciso señalar que existen muchos directorios diferentes, cada uno orientado a un tipo de mercado. Entre los principales, se pueden citar a Worldwide Brands, SaleHoo, Doba o Wholesale Central.
En resumen
Ahora que ya se tiene claro qué es el dropshipping, es hora de hacer números y averiguar si es la modalidad que se ajusta a las necesidades de un gestor de la tienda online.
Es preciso recordar que aunque la inversión inicial se vea reducida, por no tener que almacenar ni adquirir stock, es preciso trabajar aspectos tales como la usabilidiad, el diseño, el marketing online o la experiencia de usuario para que el negocio funcione bien.
Saber elegir el mejor partner también es una forma de asegurarse el éxito del negocio.